lunes, 2 de mayo de 2011

Fases del proceso de intervención con familias

Nos encontramos ante el caso de un niño disfémico de 10 años, su tartamudeo aumentó en los últimos meses y, a pesar de que tuvo problemas de fluidez desde que empezó a hablar, sus padres se mostraron preocupados. Para que la fluidez en el lenguaje del niño mejorase y éste se mostrara menos tenso en situaciones difíciles, pedimos la colaboración de la familia. Este proceso de intervención consistió en el desarrollo de cuatro fases.

Se comenzó con la primera fase, que consiste en establecer la relación entre logopeda-familia. En ese momento, la familia y el logopeda intercambiaron información del niño sobre los siguientes temas: había antecedentes de una posible hipoxia perinatal, lo cual pudo haber contribuido a la falta de fluidez en el habla; fue operado en dos ocasiones (con cinco años de apendicitis; y con cuatro años de vegetaciones, lo cual sí que pudo haber influido en el habla).
Con cuatro años, su lenguaje espontáneo era escaso, con baja inteligibilidad por problemas de pronunciación; esta etapa coincidió con la escolarización del niño en un colegio bilingüe y fue cuando se detectaron dificultades en el lenguaje oral y de aprendizaje de la lectoescritura, en ese momento un psicólogo le diagnosticó dislexia.
Posteriormente, los padres decidieron cambiar al niño de colegio lo que provocó algunos problemas de conducta, como retraimiento, evitar las tareas, etcétera, haciéndose más evidentes las difluencias en el habla, y la presencia de bloqueos intensos.
Para ayudar al niño a que superase sus dificultades se pasó a una segunda fase, la búsqueda de soluciones. En esta fase la familia tomó conciencia de las situaciones en las que su hijo se comunicaba bien, aunque fuese excepcionalmente. Por eso, informaron al logopeda de que su hijo no tenía problemas de relación en el colegio, a pesar de que le costara hablar con sus compañeros, sus dificultades fueron menores. En cambio, en la clase no preguntaba por temor al tartamudeo y las burlas.
El temor que mostraba en las clases, dio lugar a que durante el curso escolar mostrase mucha tensión muscular a la hora de hablar en público y tuviese una mayor ansiedad, sin embargo en las épocas vacacionales disminuían todas estas dificultades.
Se buscaron posibles fortalezas o aspectos positivos. En este caso, Daniel tenía miedo a leer delante de toda la clase, pero era capaz de leer ante un grupo reducido o ante su profesor. Se realizaron estudios psicológicos y los resultados indicaron que no tenía problemas intelectuales, a pesar de que aún persistían algunas dificultades en la lectoescritura. Daniel mostró deseos de mejorar la lectura delante de sus compañeros, por eso, se partió de la motivación del niño, de tal modo que pudimos establecer soluciones para ello.
A continuación pasamos a la tercera fase, basada en la enseñanza de recursos para la comunicación. Necesitábamos la máxima colaboración de la familia, por eso se les pidió que utilizasen la observación directa en diferentes situaciones reales.
El niño no estaba realmente motivado puesto que era su tercer tratamiento logopédico pero partimos de que tenía una motivación para mejorar en la lectura, ya que se mostraba interesado en conseguir leer delante de todos sus compañeros, por eso mostró una mayor iniciativa a la hora de realizar esta actividad. Para que lo pudiera conseguir, se llevó a cabo el siguiente proceso: en primer lugar, en la consulta el logopeda le marcó un patrón de lectura lento que el niño tenía que seguir paralelamente y combinándolo con una buena respiración se eliminó la tensión muscular. Cuando el niño fue capaz de realizar la tarea, se le estimuló para que continuase solo. Seguidamente, cuando la lectura fue fluida, tuvo que llevar a cabo el ejercicio en su casa con ayuda de su madre, y más tarde, tuvo que continuar con la lectura él solo, pero con alguien que le escuchase.
Una vez que se consiguió mejorar la lectura en Daniel, se trató de mejorar el lenguaje oral, utilizando un patrón de habla lento. Al igual que en el tratamiento de la lectura, primero se trabajó en la consulta y después se trasladó a casa, donde colaboró el hermano mayor. En un principio, debía hablar con la madre durante un tiempo limitado, utilizando el habla enlentecida y evitando bloqueos. Más tarde, debería hacerlo con su padre y su hermano, y así, más adelante, podría usarlo en situaciones problemáticas.
Puesto que uno de los recursos que utilizó la familia fue el modelado, se les pidió a los padres que cambiasen la forma de comunicarse con su hijo. Estos, utilizaban un lenguaje con un alto nivel de complejidad sintáctica y un vocabulario muy difícil para el niño, lo cual provocaba un impedimento para los intercambios comunicativos que quería tener el niño. Sus padres eran un modelo difícil de imitar.
Para que el tratamiento continuase siendo exitoso, se llevó a cabo el entrenamiento en relajación, con la técnica de Jacobson (1938). El niño debía realizar de manera regular los ejercicios para poder eliminar las sensaciones desagradables de tensión en determinadas partes de su cuerpo. Una vez que esto estuvo instaurado, se fueron introduciendo poco a poco las situaciones conflictivas para él, para que pudiese afrontarlas. Se pidió la colaboración del profesor, y se le dieron ciertas pautas a Daniel (bajar la voz, cuchichear, emitir un sonido al comienzo de la emisión…), así éste consiguió leer delante de su clase.
Finalmente se llevó a cabo la última fase, que consistió en su seguimiento. En los primeros 12 meses de tratamiento se consiguió que Daniel hablase sin bloqueos en todas las situaciones, no se retrajera de hablar y supiera qué hacer cuando se sintiese tenso. Tanto los padres como él mismo valoraron su mejoría. Las sesiones fueron frecuentes, es decir tenía varias sesiones semanales.
A partir de los 12 meses, las sesiones se distanciaron, dejando una sola sesión a la semana, de tal modo que se pudiese hacer un seguimiento de la evolución. Indicando los ejercicios que tenía que realizar y recomendando a los padres que animasen al chico. Durante los 3 meses que fue observado por los diferentes implicados en el tratamiento, tuvo algunos problemas en situaciones conflictivas, pero se les informó a los padres de que podía existir algún momento donde le fuera difícil controlar la fluidez.
Después de este período (es decir, a los 15 meses), las sesiones comenzaron a ser quincenales, y en ellas se les indicaba cómo debían resolver las dificultades. A los 19 meses fue dado de alta. Y, además se comprobó que a los 2 años de iniciar el tratamiento aún persistían sus avances de forma significativa.

miércoles, 27 de abril de 2011

Aplicación de Conocimientos ABP

Este texto va dirigido a Rosa y Andrés, que son los padres de Juan, con el objetivo de informar de la situación de su hijo dentro del desarrollo normalizado del lenguaje y darles pautas para que el niño continúe con una evolución lingüística favorable.

En primer lugar hablaremos acerca de las dificultades articulatorias que los padres de Juan han detectado en su hijo, a pesar de que comprende todo lo que le dicen.
Éste emite protopalabras que son las producciones preferidas de las últimas etapas del período prelingüístico y se encuentran entre el balbuceo no reduplicado y las primeras palabras, las cuales, son sólo comprendidas por su entorno más  cercano (como las emisiones de Juan: “guau” y “tota”).
Los padres creen que estas dificultades pueden haber sido provocadas porque no le han hablado lo suficiente cuando era un bebé.

Se considera que Juan tiene entre 18 y 24 meses porque según las emisiones plasmadas en el texto se observa que está en la etapa de explosión del léxico, es decir, que está aprendiendo vocabulario y adoptando un cambio en los procedimientos de aprendizaje que, según indican los estudios de Benedict (1979), significa que los niños comprenden aproximadamente cincuenta palabras mientras que sólo son capaces de producir diez.
Como explica McNeill, el niño durante este período utiliza una sola palabra que contiene una frase implícita (holofrase) debido a las dificultades expresivas que posee y que le impiden hacer emisiones más largas, aunque en su mente las oraciones son más largas y complejas dado que la comprensión va por delante de la producción.
A la vez que surgen estos cambios, también se debe tener en cuenta lo que plantea Nelson, dentro de la subetapa de las 50 palabras debemos considerar la adquisición de los símbolos léxicos (16-24 meses), que consiste en la emisión de palabras para descubrir el nombre correcto de cada objeto.
En base a lo dicho anteriormente, se tienen que destacar ciertas estrategias que utilizan los niños a partir del año, que son de tipo receptivo como por ejemplo, el principio de generalidad, en el que se utiliza el mismo término para hablar de cosas que tienen características parecidas (como cuando Juan dice “guau” para referirse a todos los animales).
El otro tipo de estrategias son las expresivas, tal como las emisiones evocativas, lo que significa que el niño hace afirmaciones mediante las cuales nombran entidades u objetos. De forma que antes de que el niño diga pelota correctamente, ya sabe lo que es y por eso dice “tota”; lo conseguiría decir adecuadamente recibiendo la retroalimentación de los padres, que le corrigen para así cambiar lo que ha dicho mal.
Esto también tiene que ver con la simplificación del habla adulta que hacen los niños durante el proceso de adquisición del lenguaje, lo cual se basa en que las primeras palabras suelen ser monosílabas (CV) o bisílabas (CVCV), y a esta edad los fonemas consonánticos que ya han adquirido los niños son /b/, /p/, /t/ lo que explicaría que diga “tota”.

 Además se utilizan estrategias de aproximación a los sonidos adultos, son emisiones muy distorsionadas como el proceso de asimilación, que consiste en el cambio de un sonido por otro próximo, por lo que cambia el “lo” de pelota por “to”, que se encuentra en la sílaba siguiente.

Finalmente, después de informar a los padres del desarrollo normalizado del lenguaje de su hijo, se les debe clarificar que la emisión de palabras como “tota” no es un error o problema articulatorio sino que es una estrategia o proceso activo que utilizan los niños para producir palabras con el objetivo de originar emisiones cercanas al habla adulta.
Hay que hacer saber a los padres que el babytalk (caracterizado por la frecuencia de imitaciones del adulto al niño y del niño al adulto, la utilización de un lenguaje muy entonado, fonéticamente correcto y sencillo) es importante para el desarrollo del lenguaje del niño, pero no decisivo. 

jueves, 31 de marzo de 2011

EJERCICIO Nº2

MODELOS DE APRENDIZAJE
Para comenzar debemos delimitar brevemente el concepto de aprendizaje desde el modelo conductual; lo podemos definir como el cambio duradero en la conducta observable que se produce por la experiencia. Dentro de este modelo encontramos tres tipos de aprendizajes: la contigüidad, el condicionamiento clásico y el condicionamiento operante. A continuación definiremos brevemente cada uno de los aprendizajes conductuales:
-       Contigüidad: asociación simple de un estímulo con su respuesta.
-       Condicionamiento Clásico: respuestas emocionales o fisiológicas a un estímulo. Dentro de este condicionamiento encontramos:
o   Generalización
o   Discriminación
o   Extinción
-       Condicionamiento Operante: cambios en la conducta debido a las consecuencias siguientes. Este aprendizaje se lleva a cabo aplicando los refuerzos (positivos y negativos) y castigos. Dentro de este condicionamiento encontramos:
o   Feedback o retroalimentación
o   Modelado

Frente a los modelos cognitivos, el aprendizaje estudia la forma en que el conocimiento se almacena y recupera de la memoria. Este modelo se basa en un conjunto de almacenes (registro sensorial, almacén a Corto Plazo, y almacenamiento a Largo Plazo) los cuales incluyen determinados procesos cognitivos (atención, procesos de memoria, solución de problemas y evaluación de la respuesta). A su vez, estos procesos son controlados por la metacognición, elemento de gran importancia para el aprendizaje.  
Toda esta información la podemos visualizar en el siguiente esquema:


Por lo tanto, para concluir resumiremos las diferencias claves en estos tres puntos:
·         Mientras que el modelo conductual tiene en cuenta la maduración y el aprendizaje del sujeto influida por la experiencia, el modelo cognitivo estudia la forma en que el conocimiento se almacena y recupera de la memoria.
·         Por otro lado, los conductistas se basan en la modelación de la conducta y los cognitivistas tienen en cuenta el procesamiento de la información, del cual depende de tres tipos de almacenes impulsados por procesos cognitivos.
·         Un elemento de gran importancia en el aprendizaje basado en el modelo cognitivo es la metacognición. Sin embargo, en los modelos conductuales gana mucha importancia la modelación, de la cual parten la teoría congitivo-social y el aprendizaje vicario.
·         Del mismo modo, psicólogos  y educadores alejan  su interés por las conductas observables y abiertas, implicando los procesos cognitivos más complejos como el del pensamiento, las soluciones de problemas, el lenguaje, la formación de conceptos y el procesamiento de la información.
·         Desde el modelo cognitivo el estudiante es visto como un participante muy activo del proceso de aprendizaje, mientras que desde el modelo conductista  se caracteriza al estudiante como reactivo a las condiciones del ambiente.

EJERCICIO Nº1

Vídeos relacionados con las actividades:

PRIMER VÍDEO:     
SEGUNDO VÍDEO:


TAREA 1

Haced una enumeración de situaciones o actividades educativas que puedan ser estudiadas desde la Psicología de la Educación. Tened en cuenta para confeccionar esta lista la diferencia entre Psicología de la Educación y Psicología de la Instrucción.
Para comenzar, se debe hacer una diferenciación entre la psicología de la educación, y la psicología de la instrucción, la cual es una parte de la primera. La psicología de la educación se encarga del estudio y análisis de los procesos de cambios de comportamiento que se producen en las personas a consecuencia de su participación en diferentes actividades educativas (proceso de enseñanza/ aprendizaje). La psicología de la instrucción, por su parte, se encarga del estudio de los procesos de cambio comportamentales relacionados con situaciones exclusivamente instructivas, ya sean escolares, de enseñanza o de aprendizaje.
Ejemplos de situaciones educativas que pueden ser estudiadas desde la Psicología de la Educación son, entre otros, los siguientes:
·         La hora de la comida: un niño puede aprender, gracias a la observación y a la práctica repetida, cómo ha de comportarse en esa situación (sentarse adecuadamente, utilizar los cubiertos…)
·         El momento del aseo: el niño aprende pautas de higiene a través de la instrucción de sus padres, la observación y la imitación (lavarse los dientes, peinarse…)
·         Ir a comprar: el individuo aprende a manejar el dinero, conoce lo que es la compra y así puede desarrollarse en ámbitos sociales.
·         Lectura de un libro entre madre e hijo: además de fomentar la habilidad de leer, se favorece la interacción entre ambos miembros.
·         Aprender a escribir: el profesor le indica al niño cómo ha de coger el lápiz, cómo ha de colocar la mano y los dedos, y los movimientos que tiene que seguir. Al principio puede que necesite que sea el profesor quien mueva su mano, más adelante, el propio alumno se dará cuenta de que es capaz de escribir solo sin seguir ningún tipo de plantilla.
·         Atarse los cordones: la madre enseña a su hijo que tiene que coger los cordones de una zapatilla, hacer un nudo, después un lazo con un cordón, y después otro lazo en el otro cordón y así unirlos para hacer un nudo entre ellos. La madre al principio deberá guiar las manos del hijo, pero más adelante él será capaz de hacerlo solo.



TAREA 2

1)  Hablad sobre las tres dimensiones de la Psicología de la Educación y tratar de reflexionar sobre ellas a partir de los vídeos.

Las tres dimensiones de la Psicología de la Educación son las siguientes:
·         Teórica o explicativa: trata de comprender y explicar mejor las características, desarrollo y consecuencia de los procesos educativos. Incluye una serie de conocimientos conceptualmente organizados sobre los componentes psicológicos de los procesos educativos. Su finalidad es comprender y explicar el conocimiento estudiado. Son el conjunto de conocimientos que permiten al logopeda comprender y detectar el caso, y saber cómo afrontarlo.
·         Proyectiva o tecnológica: contribuir al diseño de situaciones educativas, lo cual plantea enseñar éstas para que así se produzcan los diferentes procesos de cambios en quienes participen en ellas. Es, en definitiva, la planificación de la actividad de aprendizaje y enseñanza. En este momento es cuando el logopeda elabora el procedimiento que llevará a cabo en la intervención, es el proceso de rehabilitación.
·         Práctica: conocimientos de naturaleza técnica e instrumental, orientados a la intervención y a la resolución de problemas concretos surgidos en la puesta a punto o en el desarrollo de actividades educativas. Se basa en la interacción directa en el desarrollo de los procesos educativos, incluyendo conocimientos de técnicas e instrumentos para la intervención de procesos educativos, es poner en práctica el método que se ha elaborado previamente.
Dislalia del fonema “R”:
·         Teórica o explicativa: partimos del conocimiento que tenemos sobre cómo ha de colocarse la lengua para pronunciar el fonema “R”, es decir, colocando la lengua en el paladar y haciendo que ésta vibre. Gracias a que la logopeda ha adquirido estos conocimientos anatómicos, lingüísticos y fonéticos, es decir, una base teórica, resulta mucho más fácil llevar a cabo la intervención y así poder estimular a la niña.
·         Proyectiva o tecnológica: la planificación de la logopeda para cada sesión, en ella se incluiría el momento en que le enseña a la niña sus conocimientos, por ejemplo, cuando le muestra que ha de colocar la lengua en las arruguitas del paladar para poder pronunciar bien la “R”.
·         Práctica: hacer que la niña repita las mismas palabras hasta que no cometa errores, mirarse al espejo para comprobar que ha entendido cómo colocar la lengua…
Método “Adryna”:
·         Teórica o explicativa: la madre se planteó que sus hijos podrían relacionar las expresiones bucales con las sílabas y así romperían las barreras que tienen estos niños a la hora de expresarse. Gracias a ciertos conocimientos previos (sobre la enfermedad, logopedia, psicología…) adquiridos por ella, pudo elaborar este sistema.
·         Proyectiva o tecnológica: este método se compone de cuatro fases, en un principio, se le muestra al niño tarjetas con la forma de la boca a la vez que pronuncia el sonido, seguidamente acelera el ritmo al enseñar las tarjetas y finalmente el niño consigue formular palabras, en este momento, se quitan las tarjetas para que el niño pueda asociar las palabras a las imágenes.
·         Práctica: la madre valora los resultados obtenidos y así puede comprobar la efectividad de su método y modificarlo si fuese necesario. Es aquí, cuando la madre consigue demostrar que los médicos se equivocan cuando daban por perdida la posibilidad de que los niños a partir de los 14 años ya no pueden hablar. Además, gracias a este método, la madre consigue calmar a su hijo, centrando su atención y disminuyendo la agresividad.

2)  Ejemplificad la definición de Psicología de la Educación y sus bloques de contenidos a partir de ambas experiencias.
Inicialmente, definiremos el concepto de psicología de la educación y después lo ejemplificaremos, en base a los vídeos expuestos:
La psicología de la educación, es una disciplina diferenciada de la psicología y de la educación, que se encarga de estudiar los cambios comportamentales que se producen en las personas como consecuencia de su participación en actividades educativas. Tienen un objeto de estudio propio y la misión de aportar conocimientos nuevos sobre éste.
En los vídeos vemos reflejada la función de esta disciplina de la siguiente forma:
En el primer vídeo podemos ver cómo la niña con dislalia cambia su comportamiento tras poder pronunciar correctamente el fonema “r”, con la ayuda de las instrucciones de la logopeda. Este cambio comportamental se manifiesta a lo largo de la intervención de la logopeda, como bien representa el vídeo; y se verá proyectada al resto de los ámbitos en los que se desenvuelve la niña.
Con respecto al segundo video, los niños con autismo, cambian su comportamiento al ser instruidos por su madre con el Método Adryna, ya que aprenden a comunicarse con la madre según lo que ella les ha enseñado previamente, y como consecuencia de este aprendizaje, también comienzan a controlar sus diferentes emociones, entre otras cosas.
Con estas intervenciones, vemos reflejado que tanto el logopeda como la madre de los niños autistas, han estudiado y analizado, con los instrumentos conceptuales y metodológicos propios de la psicología, el ámbito de la educación teniendo como finalidad de este análisis la aplicación de los diferentes métodos de enseñanza, para así proceder a la intervención.
Los bloques de contenidos que nos podemos encontrar son los siguientes:
·         Los intrapersonales como por ejemplo, las emociones, el nivel de desarrollo, la madurez intelectual, etc.
o   En el primer vídeo no se observa directamente este cambio, pero podemos pensar que la niña siente una satisfacción cuando es capaz de pronunciar el fonema “R”, ya que supone un esfuerzo para ella.
o   En cambio, en el segundo vídeo podemos ver cómo el niño autista se muestra mucho más relajado y no es tan agresivo como era antes gracias a la educación que ahora recibe de su madre.
·         Los interpersonales son los factores que dificultan, obstaculizan o facilitan los procesos de cambio comportamentales de los sujetos.
o   En el primer vídeo, un factor interpersonal sería la logopeda, que es quien interactúa con la niña y así le ayuda a mejorar su dificultad.
o   En el segundo vídeo, es la madre el factor interpersonal fundamental, ya que es quien, gracias al Método Adryna ayuda a cambiar el comportamiento de los niños.

3)  Coll hace hincapié en que la Psicología de la Educación es multidisciplinar. Reflexionad sobre las disciplinas que aportarían conocimientos importantes en estas dos situaciones.
Cuando decimos que la Psicología de la Educación es multidisciplinar queremos decir que no funciona como una sola disciplina, sino que se apoya en otras disciplinas o materias de enseñanza. Algunas de ellas relación son las siguientes:
·         Psicología: es la disciplina que estudia los procesos psíquicos, así como los procesos sociocognitivos que se producen en el entorno social. Es importante que los niños reciban un apoyo psicológico y moral adecuado,  por eso podemos ver en los vídeos que la madre y la logopeda comprenden la situación de los niños y saben cómo ayudarles.
·         Didáctica: son los diferentes métodos para llevar a cabo la enseñanza. En ese caso los métodos elegidos son la repetición del fonema “r” y el Método Adryna.
·         Lingüística: es la ciencia encargada de estudiar el lenguaje. Estaría presente en ambos casos, ya que en el caso de la logopeda, ésta debe conocer las características propias del lenguaje para enseñar cuál es la posición adecuada de la lengua para pronunciar el fonema “r”; y en el caso de los niños autistas, la madre muestra cuál es la posición de la boca para cada fonema a través de imágenes.
·         Pedagogía: Se trata de una ciencia de carácter psicosocial, cuyo objeto de estudio es la educación.  Lo que intentan tanto el logopeda como la madre es crear un clima óptimo, para que el aprendizaje de los niños sea más rápido.
·         Medicina: es la ciencia dedicada al estudio de la vida, la salud, las enfermedades y la muerte del ser humano, en este caso se dedica a todos estos estudios menos al último. Tanto la logopeda como la madre, deben conocer a la perfección la patología para así poder tratarla (conocer sus efectos, consecuencias…).